Reducir el déficit operacional, mejorar su posición de acuerdo con los activos netos y disminuir la dependencia de las transferencias del gobierno central es el camino para que los municipios tengan desarrollo económico a largo plazo, de acuerdo con el economista Kevin González, miembro de la junta de directores de ABRE Puerto Rico.

González conversó con EL VOCERO sobre la situación de los ayuntamientos en la Isla y adelantó que para verano de este año deberán publicar un nuevo Índice de Salud Fiscal Municipal, correspondiente al análisis realizado para el año 2021. Desde el 2015, la entidad sin fines de lucro estudia las finanzas de los municipios.

“Para ABRE, los datos son la mejor herramienta que tienen los ayuntamientos para mejorar su desempeño, y este índice, más allá de asignar una nota, puede ser un gran paso para que los municipios comiencen a realizar alianzas entre ellos. Incluso, pueden salir mejores prácticas a partir de municipios que han mejorado y estudiando cómo lo han logrado”, señaló González.

Fundamentado en los datos que por años han levantado, indicó que los municipios deben mantener prácticas básicas como asegurarse de no exceder gastos sobre ingresos en el fondo general del ayuntamiento durante el año fiscal, así como mantener un balance saludable de dinero en el fondo general, no reducir los activos netos durante el año y reducir las obligaciones de deuda a largo plazo.

Añadió que los municipios deben estar atentos de manera constante a las dinámicas que afectan los ingresos —como la población, recesión económica y fuga de empresas— para hacer los ajustes correspondientes en el gasto.

Asunto de ingresos y gastos“Al final es un asunto de ingresos y gastos. Si seguimos operando creyendo que podemos suplementar el gasto con cosas que quizás ocurran a futuro, seguimos comprometiendo a las generaciones futuras. Tenemos que buscar tener esa disciplina a corto plazo para tener un mayor rendimiento a largo plazo”, expresó González.

Aunque no ofreció un adelanto de los próximos datos que publicarán, reconoció que, en comparación con el último índice realizado y publicado en 2020, “la mirada pudiera ser distinta”, debido a situaciones complejas registradas en la Isla, como la pandemia del covid-19 y los diferentes eventos naturales, como terremotos y huracanes.

“Siempre hemos querido enfatizar que este índice es una herramienta, y podemos ver los factores que han afectado o mejorado el desempeño. En la práctica, los alcaldes pueden ver el desempeño de su ayuntamiento vis a vis con sus pares, y ver la arquitectura de sus ingresos y sus gastos para delinear estrategias”, agregó González.

Dijo que, en términos del gasto, “hemos visto que los municipios han usado muchas fuentes de fondos para complementarlo. La mayor parte del gasto va a estar ocurriendo con fondos no recurrentes o fondos federales, pero este índice se ancla al fondo general”.

Planteó que factores como la eliminación del Fondo de Equiparación, ponen en precario a los ayuntamientos y ello representa un reto mayor en el manejo de las finanzas. Mientras, la Asociación de Alcaldes y la Federación de Alcaldes se sostienen en la solicitud a la Junta de Control Fiscal (JCF) para que les autorice el Fondo de Servicios Esenciales.

Los alcaldes han solicitado $150 millones para operar y —si no son aprobados por la junta fiscal— también han pedido al gobernador Pedro Pierluisi que los asigne de los $300 millones a los que tiene acceso para uso discrecional.

González señaló que “el tema a nivel municipal es la calidad del gasto, y es donde quizás uno puede ver que en el pasado estas asignaciones presupuestarias iban a fondos no restrictos, o no estaban atados a medidas de desempeño. La oportunidad que tienen todos los municipios en este momento es que aquellos que puedan mejorar la calidad de sus gastos son los que posiblemente sean mayores recipientes de fondos. Eso le va a aplicar de fondos de asignaciones especiales, o incluso en su capacidad para captar fondos de desarrollo”.

Reiteró que los municipios deben pensar en mejorar las métricas de desempeño para allegar fondos adicionales.

El economista informó que, según el último estudio publicado en 2020, cerca de 15 municipios habían mejorado su posición con respecto a los años anteriores, “y de lo que esto habla es de que es posible mejorar. Lo que uno piensa en estas cosas fiscales es que son generacionales, y argumentos como que ‘Me entregaron un municipio quebrado, no hay forma’”, y la realidad es que pueden hacer cambios.

Explicó que con el nuevo estudio verán el cambio que han experimentado los municipios durante los últimos años, y recordó que, entre los hallazgos de la séptima edición del índice, sobresalió que al menos el 60% de los ayuntamientos habían estado operando en déficit. Además, durante el 2019 —a dos años del devastador huracán María— el 54% de los municipios disminuyeron sus activos netos, y el 46% tuvo una disminución en el balance del fondo general, y otro 35% tuvo balance negativo en el fondo general. Dijo que el 40% de los municipios recibe más del 40% de los ingresos del fondo del gobierno central, que ha experimentado reajustes como parte del Plan Fiscal.

Fuente: El Vocero

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