El contrato para la compra de las unidades de generación de emergencia a New Fortress Energy (NFE) tendría un costo entre $300 y $310 millones, supo ayer EL VOCERO.

El gobierno de Puerto Rico debe aportar el 10% de esa cantidad y el resto lo cubrirá la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) que -debido a la fragilidad que aún tiene el sistema eléctrico- aprobó la transacción, pero solo hasta diciembre de 2025 cuando se espera que la red se habrá estabilizado.

El costo del gas natural para los generadores es aparte y no se han informado detalles sobre el precio que el gobierno pagará, pero ayer finalmente se escogió una de cinco empresas licitadoras para el suplido, informó por separado el licenciado Osvaldo Carlo, dueño de la empresa Regulatory Compliance Services Corp., contratada como ente independiente externo para llevar a cabo el proceso en busca de evitar conflicto de intereses.

El abogado declinó identificar la compañía seleccionada porque ahora dependen de que la Junta de Control Fiscal (JCF) apruebe los fondos que se requieren para poder firmar el contrato. NFE fue una de las licitadoras.

“Va corriendo bien el proceso (de subasta de suplido de combustible). Nos ha sorprendido y puede ser mañana (hoy) que se firme, no hay seguridad, pero puede ser”, declaró.

El manejo y operación de los generadores están a cargo de FEMA y del Cuerpo de Ingenieros (USACE) hasta la medianoche de hoy. Ayer en la tarde seguía la incertidumbre sobre si para entonces se lograría cerrar el contrato con NFE para que la titularidad de las unidades pase al gobierno, aunque sería la subsidiaria de la empresa, Genera PR, la que estará a cargo de su funcionamiento.

Distintas fuentes aseguraron que hay mucha preocupación al interior de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y de LUMA Energy, encargada de la transmisión y distribución de energía, ante la posibilidad de apagones por falta de generación, en caso de que no se logre la firma en las próximas horas. Las personas consultadas y que hablaron bajo condición de anonimato porque no están autorizadas a divulgar información dijeron que los trabajos de reparación de las unidades generatrices están atrasados y los tres megageneradores que se compraron después del huracán María y que suplen unos 80 megavatios, no tienen todos los permisos para operar a menos que las reservas de combustible lleguen a niveles muy bajos.

El secretario auxiliar de energía, Francisco Berríos Portela y los directivos de Genera PR insisten en que “están optimistas” con que se firmará el contrato antes de la medianoche de hoy, “o en los próximos días”. Asimismo, insistieron en que se han hecho los “ajustes necesarios” para garantizar que se cumpla con la demanda de energía.

No obstante, Berríos Portela dijo que Genera tiene espacio para mejorar su desempeño.

“Ellos tienen ahora que demostrar. Hay que asegurarse que se mantengan esas unidades operacionales siempre. Hay espacio para mejorar. Siempre queremos que se agilicen los trabajos más de lo que se ha logrado, pero, está por verse ese desempeño, sobre todo en la época alta de demanda”, indicó.

Ayer en la mañana, unos 100 mil clientes se quedaron sin energía cuando la unidad 5 de Costa Sur -que había retornado a operaciones en días recientes- salió de servicio. A las 6:00 de la tarde apenas estaba generando alrededor de una cuarta parte de su potencial.

“Estamos bien optimistas con poder cerrar el contrato de la compra (de los generadores). Se sigue trabajando con todas las partes y la realidad es que a pesar de la salida de Costa Sur, que hasta ahora, pues no se ha identificado nada mayor, ha estado la unidad 9 de San Juan, que es otra unidad también que va a apoyar y hay otras unidades. Así que dentro de todo el escenario todavía está estable y no se anticipa, aunque no tuviéramos disponible por algunos días la generación temporera, se sigue trabajando con el tema del contrato”, expresó Berríos Portela en entrevista con EL VOCERO.

Según el funcionario, FEMA hizo el compromiso de seguir apoyando al gobierno, en caso de que fuera necesario, en “temas de cumplimiento ambiental” relacionado con los generadores para que sigan proveyendo los 350 megavatios que suplen al sistema, “con los controles de emisión que tienen implementados hasta ahora”.

Fragilidad de la flota

Daniel Hernández, vicepresidente de Operaciones de Genera PR, informó que la unidad 5 de Costa Sur tuvo “un desperfecto de instrumentación”. Dijo que “en cualquier momento” debía entrar en servicio nuevamente.

Genera sacó de servicio a Costa Sur 5 en junio para darle el mantenimiento programado, había dicho Hernández anteriormente. Se esperaba que esa unidad retornara antes de que acabara el 2023, pero no fue hasta días recientes que entró en servicio y ayer se dañó.

“Fue momentáneo, fue una salida forzada, pero el sistema completo no tiene la respuesta rápida que hace falta y siempre toma 15 o 20 minutos en los que entran las unidades de respuesta” y se subsana la situación, dijo Hernández.

El encendido de unidades de respuesta que funcionan con combustibles más caros también preocupa al personal de la AEE, dijo una de las fuentes, porque se le acorta la vida útil cuando todavía la demanda de energía no está en los picos de la temporada de calor.

Hernández indicó que junto a las otras cogeneradoras, Ecoeléctrica y AES, trabajan en conjunto para que haya suficiente producción de energía.

Reconoció que los preparativos en caso de que no se firme el contrato de compra de generadores consisten en “atrasar los mantenimientos” programados.

“Precisamente, yo tenía dos unidades que salían la semana que viene: la unidad 2 de Aguirre para un mantenimiento, igual la unidad 6 de San Juan… Lo que hemos acordado tanto Luma como nosotros es poder atrasarlo un poco hasta tanto tengamos otra vez las unidades (de emergencia)”, detalló.

Por otro lado, dijo que la unidad 9 de la Central San Juan entraría hoy en servicio, la unidad 6 de Costa Sur “debe estar entrando a finales de este mes”, la unidad 1 de Aguirre debe reintegrarse en “tres o cuatro semanas” y la unidad 3 de Palo Seco entraría en mayo.

“O sea, que la expectativa nuestra es que ya para julio nosotros estemos en mucha mejor posición”, argumentó.

Y aunque Hernández aseguró que estaban disponibles los tres meganeradores que se compraron tras el paso del huracán María y cuya instalación tuvo múltiples traspiés, debido a incumplimiento con reglamentación de la Agencia Federal de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés), Berríos Portela indicó que en abril se podría retomar su operación “normal”.

“Esos generadores están sujetos a una cantidad de horas al año que ya se consumieron y que reinicia el conteo de horas en el mes de abril, que eso también es otro asunto. Si los megageneradores están ahí en caso de que fuera necesario utilizarlos, sí tenemos un entendimiento de que se pueden utilizar. Obviamente es la última alternativa por la situación de permisología con la EPA”, explicó.

Dos fuentes de este diario que conocen del funcionamiento de esas tres unidades dijeron que si las reservas de producción de energía bajan de entre 80 a 50 megavatios se pueden poner a funcionar temporeramente. De lo contrario, deberían permanecer apagadas.

Fuente: El Vocero

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