A horas de la fecha límite para radicar las planillas de contribución sobre ingresos, el secretario de Hacienda, Francisco Parés Alicea dijo que este año, podrían estar cerca de recibir la mayor cantidad de recaudos para el fisco en su historia.

Estimó que los recaudos al Fondo General (FG) podrían ascender –en total– a unos $14,000 millones, cuando se incluyan fondos como el impuesto al petróleo, conocido como “la crudita”. Hasta marzo pasado, la agencia ya recibió unos $9,000 millones en recaudos por distintos impuestos y contribuciones.

“Este año debe ser el año que más se recaude, o el segundo que más se recaude. El año pasado fue el año que más hemos recaudado. Fueron $13,500 millones, aproximadamente”, dijo Parés Alicea en entrevista con Negocios.

A su entender, varios factores explican el comportamiento de los recaudos que llegan al principal fondo del gobierno y que a su vez, son la fuente para pagar la mayoría de los servicios gubernamentales desde el gobierno central, pero también las pensiones de sobre 160,000 jubilados del sector público.

Mencionó la digitalización de los servicios que ofrece la agencia, estrategias de fiscalización y alrededor de $200 millones en recaudos por ventas en Internet.

“Hay gente que le gusta asignar el resultado a un solo factor y dicen que es por la inflación o los fondos federales. Yo creo que es por un sinnúmero de factores o por varios factores”, dijo Parés Alicea, quien ha estado al frente de Hacienda por los pasados seis años.

“En el año natural 2022, notificamos a más de 7,000 contribuyentes que tenían algún tipo de actividad económica y que no habían radicado planillas ante Hacienda. Fue un trabajo de inteligencia con el IRS (Servicio de Rentas Internas de Estados Unidos) que nos compartieron información y pudimos detectarlos y notificarlos para que se registraran”, relató.

La jornada de planillas

Hasta la semana pasada, Hacienda había recibido unas 982,449 planillas de contribución sobre ingresos correspondientes al año contributivo 2022. La cifra representa unas 110,000 planillas menos de lo que habían recibido a la misma fecha el año pasado.

El funcionario dijo que esas planillas adicionales responden a un nform de fraude contra la agencia.

“(El año pasado,) se radicaron de 80,000 a 90,000 planillas con la intención de nformti pagos indebidos de unos incentivos de $1,400 y el nform paralizó los pagos. Sin eso, el número de planillas va a ser similar al año pasado. Debemos nformt el millón de planillas”, aseguró.

Al momento, la agencia ya desembolsó unos $1,140 millones a unas 670,000 planillas con derecho a reintegro.

La nformtive del secretario es que, al final del ciclo, el gobierno haya pagado $1,600 millones en reintegros a los contribuyentes. Afirmó que gran parte de tales pagos -unos $1,100 millones– responden al Crédito por Trabajo, beneficio que ya reclamaron unas 526,000 familias de las 640,000 que cualifican.

Sobre el crédito por dependientes menores, Hacienda nform que se han radicado 708 planillas federales reclamando este crédito.

La planilla prepoblada

Desde el pasado ciclo contributivo, Hacienda comenzó a prepoblar las planillas de los contribuyentes asalariados, es decir incluir datos de antemano, con el fin de facilitar el proceso de radicación de planillas a través del Sistema Unificado de Rentas Internas (SURI).

Parés Alicea explicó que han ido agregando información y adelantó que para las planillas del próximo año, también esperan incluir los intereses hipotecarios vinculados a cada contribuyente.

“Este año fue más abarcador porque incluyó la informativa de servicios profesionales. El año pasado, incluimos la W2 del contribuyente principal”, dijo.

Agregó que cerca de 181,000 contribuyentes han radicado su planilla a través de SURI. “Estamos viendo que cerca del 20% radican a través de SURI”, indicó.

A pesar de la abrumadora aceptación de la radicación electrónica, que ahora realizan decenas de empresas privadas y preparadores autorizados, su expectativa es continuar abriendo los Centros de Asistencia al Contribuyente durante la época de planillas. Este año, hasta mediados de la semana pasada, los centros ubicados en los principales centros comerciales de la isla y en el municipio de Caguas, atendieron a poco más de 20,000 contribuyentes.

“Yo no veo cambio en cuanto a eliminarlos de cara al futuro. Sí creo que el cambio grande se dio en el sentido de que en el pasado iban 60,000 (personas) y ahora van 20,000, como mucho. Se llenaron al final y es normal, pero no es la fila que se formaba antes, que era inhumano. Ahora, tenemos un sistema de citas más organizado”, indicó.

Tiempo de relativa bonanza

Podría decirse que Parés Alicea dirige la agencia tributaria de Puerto Rico en tiempos de prosperidad.

A diferencia de los años fiscales 2016 y 2017, se trata de un entorno donde hay liquidez para pagar los reintegros y también para pagar la nómina y las pensiones de empleados públicos retirados.

Si bien Hacienda recauda más que nunca, la agencia reembolsa una parte de esos recaudos en la forma de reintegros.

Hace apenas cuatro años, Hacienda reservaba unos $450 millones -o casi el 4% de los recaudos totales- para reintegros. El año fiscal pasado, esa cifra casi se duplicó a $892 milones, o el equivalente al 7% de los ingresos brutos al fisco.

Cuando se descuenta la reserva de reintegros, un vistazo al FG refleja una panorama mixto. En la pasada década, el aumento más drástico en los ingresos netos al erario se produjo en el año fiscal 2019, con un salto interanual en el orden de 22%. Pero al año siguiente, los ingresos netos del FG cayeron 18%. Asimismo, según cifras de Hacienda, el año pasado, los ingresos netos fueron 3% más bajos que los ingresos netos al FG en el año fiscal 2021.

Una reducción en los ingresos netos no significa necesariamente que el gobierno entrará entrará en déficit, pero denota un cuadro de recaudos que todavía no goza de plena estabilidad.

Hace poco más de una semana, cuando la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) certificó el nuevo plan fiscal del gobierno central, el organismo modificó drásticamente sus previsiones.

En síntesis, luego de que Puerto Rico se comprometió a pagar a los acreedores al menos $1,150 millones desde el FG por las siguientes tres décadas, en las proyecciones financieras más recientes, se adelanta un posible cuadro deficitario -antes previsto para el 2044- para los años 2027 y 2028.

Los cambios contributivos

Es en ese contexto que Puerto Rico llega al final de este ciclo contributivo y a su vez, marca el inicio de la discusión, en la Asamblea Legislativa, de la propuesta contributiva del gobernador Pedro Pierluisi.

La JSF ya solicitó una reforma “holística”, petición que el secretario Parés Alicea mira con algo de duda.

“El enemigo de lo bueno es lo perfecto. Yo no pienso que es razonable que todos los retos contributivos que existen en Puerto Rico se corrijan con una sola medida, con una sola ley. Yo veo esto como un reto que se debe mirar de distintas maneras, corrigiendo puntos donde todas las partes estén de acuerdo”, afirmó.

Aunque dijo desconocer las enmiendas que podrían hacerse durante el proceso legislativo, Parés Alicea habló de atender la reforma por partes, avanzando en los puntos de consenso.

“Pretender que un proyecto de 2,000 páginas de contenido contributivo tenga el aval de la Cámara, el Senado, la (JSF)… en un mundo democrático como el que vivimos, lo más astuto, lo inteligente, es buscar en qué áreas estamos de acuerdo darle paso a eso”, dijo Parés Alicea.

A su entender, el punto más importante de la reforma que impulsa el Primer Ejecutivo es la reducción en las tasas contributivas. “Hay un consenso de que la carga contributiva se tiene que atemperar al Puerto Rico de hoy y que se debe recalibrar el sistema contributivo”, señaló.

La búsqueda un banco

Por otra parte, el también contador público autorizado reafirmó a Negocios que para este mes, esperan abrir el proceso de competencia para escoger la institución financiera en la que depositarán al menos $6,000 millones en recaudos. Reconoció que ya hay instituciones interesadas, pero estas deberán someterse al proceso de selección.

“Es una evaluación que va a tomar en consideración los servicios que ofrece el Departamento de Hacienda y el manejo de las cuentas del secretario. Es la cuenta más compleja, por la magnitud de las transacciones. Tenemos que buscar el mejor banco a nivel de servicios”, dijo el funcionario. “No somos un cliente común. La solución debe ser customizada a las necesidades del Departamento”

Fuente: El Nuevo Día

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