Luego de que Puerto Rico fuera sede de la 8va Cumbre Iberoamericana de Juegos, el director interino de la Comisión de Juegos de Puerto Rico, Juan Santaella, informó a EL VOCERO que la industria de juegos en el País recaudó sobre $186 millones en 2023.
De estos recaudos, según datos suministrados por Santaella, el sector de casinos recaudó $177.3 millones; el sector de apuestas deportivas recaudó $505 mil y el sector del hipismo recaudó $8.7 millones, de los cuales unos $77 millones están destinados a la Universidad de Puerto Rico (UPR), una parte va al fondo general y otra parte al desarrollo e inversión para la promoción de Puerto Rico en el sector turístico.
“Se invierte para seguir trayendo turistas porque en Puerto Rico hay un auge local en los casinos por la industria del juego y porque también se han convertido en centro de entretenimiento, donde no tan solo tienen máquinas, sino eventos artísticos y otros tipos de cosas que los gerentes generales han sabido hacer. No es menos importante que es una industria que se beneficia del turista que viene a gastar su dinero y a disfrutar de Puerto Rico”, expresó Santaella.
Asimismo, el pasado director interino de la Comisión de Juegos Jaime Rivera Emmanuelli mencionó que también la industria hípica aporta al fondo general a través de lo que sale de las “cascadas” de las carreras de caballos, así como de los operadores de apuestas deportivas dependiendo si la aportación se hizo en línea o física y que también hay una aportación económica por parte de la regulación.
“La regulación es cubierta por la misma operación de la industria. La comisión saca los recursos necesarios para poder fiscalizar y además el gobierno que quizás esto no se mide monetariamente, pero la actividad del juego es una actividad que el gobierno tiene un amplio interés en regularla porque podría tener una consecuencia en la salud mental de la población y el hecho de que el gobierno no lo regula, entonces el juego ilegal crece y se le invita al juego ilegal a tomar posesión sobre esta actividad. La aportación de la Comisión de Juegos y de los negociados de loterías es sumamente esencial no solamente en lo económico, sino en también a ayudar a regular y mantener el que la actividad de juego sea una actividad de entretenimiento adicional que sea segura para el apostador que acude”, sostuvo Rivera Emmanuelli.
Por otro lado, Santaella informó que en Puerto Rico lo que hay en línea son las apuestas deportivas en la que existen sobre seis operadores, pero solo dos reciben apuestas actualmente.
A preguntas de EL VOCERO sobre dónde se observa la mayoría de las apuestas, el director interino de la Comisión de Juegos indicó que que en los casinos Casino Metro y Casino del Mar son de la misma proporción que se observa en Estados Unidos, donde el 20% es presencial, versus un 80% en línea.
“Al jugador le gusta jugar cercano al juego desde la comodidad de su hogar y pues lo mismo que se ve en Estados Unidos con los que ya tienen apuestas en línea aprobados se ve que tiene mayor arraigo”, comentó Santaella.
Rivera Emmanuelli informó que Puerto Rico fue la segunda jurisdicción en permitir los casinos en 1948 y en el tema de hipismo se regula desde los 1900.
“Puerto Rico tiene la particularidad de que tiene dos verticales sumamente maduros con más de 75 años en los casinos y el hipismo”, sostuvo el licenciado.
Del mismo modo, informó que al aprobarse la ley de apuestas deportivas en 2019, no fue hasta principios del 2022 cuando se comenzaron a observar. Según Rivera Emmanuelli, al momento en Estados Unidos hay más de 30 jurisdicciones que tienen las modalidades de apuestas deportivas presencial y en línea y Puerto Rico está en esa lista.
“Yo creo que Puerto Rico, en mucho de los verticales es una jurisdicción de mucha experiencia y en cuestión de los nuevos verticales, como las apuestas deportivas, los juegos de fantasías y demás, estamos en un momento que se puede comparar con la mayoría de las jurisdicciones de los Estados Unidos con excepción de Nevada. Yo creo que Puerto Rico se puede decir que está a la par en comparación con las jurisdicciones de los distintos estados. En algunos vamos a estar más adelantados y en otros vamos a estar un poquito más rezagados”, expresó Rivera Emmanuelli.
Para Rivera Emmanuelli, al Puerto Rico ser parte de Latinoamérica y ser territorio de los Estados Unidos es una jurisdicción atractiva para las compañías iberoamericanas que tienen trayectoria y que les interesa explorar el mercado de los Estados Unidos. Explicó que para operar en Puerto Rico, el gobierno estatal y el federal tienen regulaciones.
“Digo esto porque Puerto Rico tiene la particularidad de que una empresa que venga de Iberoamérica que logre entrar a Puerto Rico y opere en Puerto Rico, puede después expandir su operación y se le hace más fácil el proceso de entrar a otros mercados dentro de los Estados Unidos”, señaló.
“De la misma manera, que aquellas empresas de los Estados Unidos que quieran probar sus productos en un mercado mayormente hispano, Puerto Rico es idealmente el lugar para ello porque Puerto Rico su esquema regulatorio y jurídico es bastante similar a lo de los diferentes estados. O sea, que estarían operando en un lugar donde ya conocen más o menos y tienen una idea de las reglas de juego, pero donde pudieran ver cómo van sus productos en un mercado mayormente hispano”, explicó Rivera Emmnuelli.
Fuente: El Vocero
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